domingo, 4 de agosto de 2013



ACTO DE INSTALACIÓN DE LA PRIMERA  ASAMBLEA NACIONAL DEL
GRAN POLO PATRIÓTICO SIMÓN BOLÍVAR
(CARACAS, 24 DE JULIO DE 2013)

IDEAS PRELIMINARES PARA UN DEBATE
 “Hacia la constituyente Municipal”

Hoy los revolucionarios y  revolucionarias de nuestra patria nos encontramos ante un nuevo y enorme desafío el cual es cómo continuar el proceso político de transformación sin la presencia física del gran timonel; cómo continuar su obra  revolucionaria, como emular su entrega, su pasión por Venezuela, su visión bolivariana hacia la construcción de la patria grande?
Una  respuesta  a este planteamiento colectivo lo constituye, sin duda,  la iniciativa,  del Presidente Nicolás Maduro, de dar continuidad a la consolidación  del Gran Polo Patriótico, como bloque histórico, creado originalmente por nuestro camarada presidente eterno, Hugo Chávez Frías.
En ese sentido, nuevamente cobra vigencia, los planteamientos enarbolados por nuestra organización  en relación a la necesidad de una dirección colectiva del proceso, y en este caso,  en un espacio de dirección colectiva del proceso, desde la diversidad revolucionaria, con  las distintas perspectivas de los factores que lo integran,  partidos y movimientos, con el debate y  una reflexión política honesta, hacia una visión hegemónica enraizada en valores éticos, bolivarianos  y socialistas que sean la cimiente de la sociedad igualitaria que necesitamos construir.       

En el marco de la coyuntura electoral municipal del 08-D, ante la arremetida sin cuartel de la derecha venezolana, y sus aliados imperiales, que nos consideran “mango bajito”  y ante la necesidad estratégica de superar los delicados, e importantes,  problemas del país, Patria Para Todos entiende que nos  enfrentamos a la tarea impostergable de iniciar un gran debate que nos permita   avanzar en la construcción de los consensos para  la defensa de la patria, hacia  la consolidación del proceso revolucionario y  para la definición  de un modelo socialista bolivariano que nos lleve a la suprema felicidad de nuestro pueblo, un referente para los pueblos de nuestra américa meridional, como aporte en la construcción de  un mundo de paz, mas armónico y mas justo.

Lineamientos Generales Metodológicos
En el acto de Instalación de la I Asamblea Nacional del Gran Polo Patriótico Simón Bolívar para el inicio de este gran debate colectivo  consideramos  necesario,   partir de un planteamiento general y de un planteamiento específico, ambos de carácter metodológico:  

Un planteamiento general, obligatorio,  debe ser reflexionar sobre  “El país que tuvimos, el país que tenemos, el país que queremos o la Venezuela posible. Un balance necesario”, que nos  conduce a debatir, sobre aspectos estratégicos indispensables para la revolución, como por ejemplo, el Modelo de Estado, como  abordar un plan productivo socialista para transformar a Venezuela en una potencia, cuál sería el modelo científico tecnológico, el modelo de seguridad y defensa,  y la política exterior que correspondan a tal modelo.

Este planteamiento general, sin duda, nos lleva a debatir sobre:

Como avanzar en la construcción del socialismo, desde el ámbito económico, y de  un nuevo Estado para: incrementar la productividad nacional en la derrota del rentismo petrolero,  reducir las importaciones de los insumos y productos estratégicos para el consumo de la población y los requerimientos industriales. Cómo hacer de Venezuela un país potencia. Su significado. Desde esa perspectiva evaluar el papel de PDVSA, de las Empresas Básicas de Guayana y de las unidades socialistas de producción y los Fondos Zamoranos.  El papel del sector privado y su relación con el Estado. El modelo energético,  el enfoque sustentable del modelo económico, y el modelo científico


tecnológico que requeriría  la transición al socialismo. El papel del sector financiero y de la banca en el modelo socialista. El papel de los trabajadores y del control obrero en la construcción del modelo económico socialista.
Desde el planteamiento especifico, se nos invita a comenzar el abordaje de la municipalización, con los cinco puntos estratégicos del Plan de la Patria, legado del Presidente Chávez, razón  por lo que Patria Para Todos considera es imprescindible que el GPP maneje definiciones claras, un diagnostico compartido y una visión común sobre:

1.       Cómo podemos contribuir a afianzar, desde el municipio,  la independencia nacional; 2. Cómo podemos  contribuir a que Venezuela, desde el municipio, se convierta en una potencia; 3. Cual sería el aporte para que, desde nuestro municipio, se contribuya a la construcción de un mundo multipolar? 4. Como contribuir, desde el municipio,  a una cultura ecológica? Nos invitan también a  identificar  elementos, tareas y actividades,  para un Plan de Acción orientado a cómo combatir la guerra económica y tareas para hacer más eficiente al Plan Por la Paz y la Vida.

En términos generales Patria Para Todos entiende que es necesario  crear las condiciones histórico-políticas, objetivas y subjetivas, para la superación cultural del rentismo petrolero y avanzar  hacia un “Socialismo  productivo y ético”, en plenas condiciones democráticas,  de paz y empoderamiento social, sin que ninguno de los parámetros anteriormente mencionados se contra digan  en la teoría ni en la práctica. 

Lineamientos Generales desde lo político

Para una contextualización general de la situación política actual se  destaca que la  desestabilización política impulsada en nuestro país por los sectores vinculados al puntofijismo, con apoyo foráneo, desde el primer triunfo de Chávez, hasta su desaparición física,  se han resistido  a un cambió en el modelo político lo cual develo una polarización histórica, profusamente alimentada por los medios de desinformación, nacionales e internacionales,  que se expreso con el Caracazo, con el 04 de febrero, con el golpe de abril de 2002,  con las atrocidades de  los “carmonistas”, con el sabotaje petrolero, y mas recientemente, con la celebración enfermiza por el fallecimiento del líder de este proceso y con los 11 asesinatos desatados por el odio fascista, por la victoria del 14 e abril,   y hoy, por  una guerra económica sin cuartel que tiene al pueblo contra la pared.

De la misma manera, luego de catorce años de gobierno revolucionario, estamos obligados a hacer un balance de gestión, desde la perspectiva de sus proyectos,  y sus resultados, que si bien son positivos, desde la perspectiva social y del grado de  conciencia de los movimientos porque han ha logrado una acumulación de fuerza importante, debemos preguntarnos por qué no se ha podido  dar un salto cualitativo, de abajo hacia arriba, desde la visión democrática y en la construcción del socialismo, como modelo para una nueva hegemonía cultural, que gire en torno al poder popular.

En la balanza debemos colocar que se contó con la férrea voluntad política de un gobierno que, bajo el liderazgo de Chávez, impulso y acelero esos cambios, pero que, a pesar de ese gran impulso, estos se muestran de difícil consolidación.

Corresponde ahora, desde la dirección colectiva del proceso,  con Nicolás Maduro al frente, dar una mayor direccionalidad a la revolución como herramienta para avanzar en la consolidación, y defensa  de la patria, para lo cual el Plan de la Patria 2013-2019 constituye un instrumento estratégico fundamental

Para esta enorme tarea se cuenta con un ordenamiento jurídico que si bien pueden ser controversial, o algo confuso, ofrece una plataforma necesaria para avanzar. Tenemos un pueblo mas movilizado. Se cuentan con recursos financieros. En la balanza también debemos colocar, aquellos  aspectos que afectan el avance de un proceso político, y que nos atañen,  como son: el burocratismo; el sectarismo, la corrupción,  el clientelismo, la ausencia de mecanismos de planificación, de seguimiento y control, entre otros males que tenemos. 

Desde ese enfoque, es más que nunca necesaria la activación de la vanguardia revolucionaria que acompañe al pueblo hacia la transformación socialista desde la conciencia revolucionaria.  Nos encontramos en un momento histórico lo cual supone que debemos pasar de ser sujetos de derecho a  ser sujetos de transformación revolucionaria.

En ese sentido, desde la perspectiva del sujeto de transformación,  los principios de la democracia participativa, deben ser activados para lograr que los  paradigmas del poder popular   desde el  fundamento teórico se constituyan en el  fundamento histórico desde una nueva visión de gobierno municipal que debe ser entendida, y atendida, desde la Constituyente Municipal .    

El  municipio ha sido  concebido en la Constitución Nacional, y en  la Ley Orgánica del Poder Publico Municipal, como la unidad política primaria de la organización nacional de la República, cuenta con personalidad jurídica y goza  de autonomía en el desarrollo de sus competencias, dándose espacios de   participación protagónica a las comunidades organizadas en la definición,  ejecución,  control y evaluación de resultados de la gestión pública sobre los aspectos de l vida local.

En ese sentido, la autonomía concedida al municipio tiene como finalidad  que  promueva el desarrollo  social, cultural y económico sustentable de las comunidades.  En el ejercicio de esta  autonomía  el Municipio, además de elegir a sus autoridades puede, crear parroquias y otras entidades locales.

En la práctica política, y la realidad, es que esa nueva visión del municipio contenida en la Constitución, y con las  ocho leyes del poder popular  que determina el protagonismo del poder popular como eje del gobierno municipal    no se ha podido concretar por una visión reduccionista y su significación para la consolidación del proceso revolucionario.

 Esta situación de dispersión, y de obstrucción, esta determinada, en la mayoría de los casos, por la correlación de fuerzas que se produce,  tanto en el Consejo Legislativo, como en el Consejo municipal.  


El MUNICIPIO COMO ESPACIO DE TRANSFORMACION
HACIA UNA  SOCIEDAD  IGUALITARIA DESDE   LA ORGANIZACIÓN DEL PODER POPULAR
LA CONSTITUYENTE MUNICIPAL

En ese orden,  Patria Para Todos plantea que la Constituyente Municipal, debe  ser vista como la refundación del Municipio y la  concreción de un  nuevo concepto de gobierno municipal, desde  el poder popular, y esto  constituye la  propuesta central para un   Programa  de Gestión Municipal,   a ser impulsada por los candidatos a Alcaldes y Concejales de Patria Para Todos, e incluso de todos los candidatos del Gran Polo Patriótico lo que, en nuestro criterio, nos permitirá  avanzar en  la consolidación del Poder Popular desde  los principios y normas establecidas en la Carta Magna, que interpretan  los anhelos de participación protagónica  del pueblo.

Patria Para Todos pretende, con la propuesta de la Constituyente Municipal, contribuir a establecer las fuerzas dinamizadoras que permitan construir una identidad social colectiva, para que desde  la diversidad propia de cada municipio se avance en las transformaciones sociales que exige la defensa de la patria y la consolidación de la revolución.

Es por tal razón que nos proponemos una constituyente municipal, que revise, reformule y refunde el municipio con una nueva valoración del concepto del espacio municipal, del Gobierno municipal, y de la gestión pública para que las comunidades locales  construyan, desde ese nuevo concepto, una nueva cultura democrática revolucionaria que atiendan  los problemas del municipio e incluso participe, conscientemente, en la consecución de las grandes metas nacionales del Plan de la Patria, desde sus especificas realidades.

El estudio de la política publica  nos permite afirmar que si bien se han impulsando programas  sociales, económicos,  políticos y culturales para resolver los grandes problemas del país, no es menos cierto que esos esfuerzos del Gobierno Nacional se traban en alguna parte del proceso y  parecen  quedar congelados, en  una inmensa zona gris, por cuanto  no se expresan, en la dinámica    de las gestiones publicas regionales y municipales,  observándose  una   desarticulación profunda con  los objetivos del   Plan Nacional.      
Esto sucede, específicamente, porque desde el gobierno municipal siguen cerrando el paso  al poder popular a pesar de la nueva normativa constitucional, y legal vigente, la cual si bien constituye una plataforma importante para la acción protagónica transformadora, es de reconocer que, mientras se promulgan leyes especificas para el ejercicio del poder popular (Ley Orgánica de los Consejos Comunales, la Ley orgánica de la Comuna, la Ley Orgánica de la Económica popular, la Ley Orgánica de la Contraloría Social,  la Ley Orgánica del Consejo Federal de Gobierno y su Reglamento, y la Ley Orgánica del Consejo Local de Planificación) no terminan de establecerse disposiciones, y mecanismos  claros,  para la transferencia de recursos y desconcentración de competencias del poder constituido  al poder popular en los municipios.

Los espacios para la participación popular en la gestión municipal ha derivado a  una  consulta, para cumplir un requisito aprobatorio     del presupuesto participativo, pero de ninguna manera hay una real transferencia de poder a las comunidades para la transformación social, política y económica y cultural que exige la construcción de la patria nueva. 

La resistencia del poder constituido municipal para la transferencia de poder a las comunidades tiene como aliado la proliferación de  leyes fragmentadas sobre el tema y el desconocimiento de las mismas tanto por el poder constituido como por las comunidades, sumándose a  la dificultad en su interpretación, por cuanto  las mismas no parecen tener vínculos entre unas y otras, y no terminan de aterrizar en el abordaje claro, o los puentes jurídicos, para relanzar el poder popular de las comunidades organizadas. 

 Esta situación anterior, sobre el ámbito normativo, coadyuva a que las ordenanzas y decretos de los órganos que son parte del Poder Público Municipal  se dicten, sin la participación de las comunidades organizadas y  ajenas al propósito, espíritu y razón de la  normativa sobre la transferencia de recursos y competencias a las comunidades como sujetos activos de poder.

Esta situación exige,  para el impulso de la Constituyente Municipal, entre otros aspectos, que el Programa de Gestión de los candidatos de la revolución incluya, la  revisión y derogación, en primera instancia, de  los decretos, y ordenanzas municipales, que   son ajenas a  la normativa constitucional que da cabida a la participación protagónica de las comunidades desde el poder popular.

Desde esa perspectiva nos planteamos lo siguiente:
Refundación del Municipio.- La Constituyente Municipal debe permitirnos, desde un primer momento, repensar, y refundar el municipio, esto es,  que los actores del nuevo gobierno municipal  puedan reconocer, y disponer, de manera planificada, con la perspectiva de solucionar los problemas locales,  y desde la  vocación que tengan los espacios físicos del municipio determinar que destinos deben otorgársele a esos espacios, incluso plantearse  la recuperación de aquellos que en su uso no tienen la perspectiva de bien colectivo que la comunidad se plantea para si , como también  desde la corresponsabilidad que se defina debe tener ese municipio para alcanzar las grandes metas nacionales. Este concepto de la refundación exige adecuar, y rescatar el Plan de Desarrollo Urbano (PEDUL), como el instrumento necesario de la nueva gestión municipal.

El nuevo gobierno municipal.-  Este nuevo gobierno debe constituirse en un espacio  de gestión pública en el cual confluyan, en una dinámica ordenada,  desde sus respectivas categorías, los órganos de gestión municipal  como son la alcaldía, el Concejo municipal, la Contraloría Municipal y el Consejo Local de Planificación.  El concepto del nuevo gobierno municipal  tiene su énfasis, en que la gestión pública debe nuclearse en torno a dar una redimensión política al Consejo Local de Planificación porque este en si mismo es, de acuerdo a la leyes, un espacio para la planificación, y la toma de decisiones, donde se encuentran, el poder constituido y el poder popular al mismo nivel de gestión responsable. Es allí, donde el protagonismo de las comunidades conscientemente organizadas puede ejercer su poder constituyente para resolver los problemas locales y contribuir con las grandes metas nacionales del Plan de la Patria. Hablamos de un protagonismo  que trascienda  la obligada interacción en la atención de los servicios básicos,  que requiere la población en general,  a una dinámica de participación protagónica, y  de corresponsabilidad  social,  en los asuntos propios de la localidad y del país.

Desde esa perspectiva, es absolutamente necesario que  el Consejo Local de Planificación, que de acuerdo a la Ley Orgánica del Consejo Local de Planificación goza de una estructura orgánica, y de competencias especificas en la gestión publica municipal, en el cual el poder popular tiene asegurado un papel relevante, tenga sus propias instalaciones, como las tiene la alcaldía, por ser el órgano ejecutivo,  como lo tiene el concejo municipal por ser el órgano deliberativo, como lo tiene el sindico municipal, por ser el órgano contralor, y lo debe tener el Consejo Local de Planificación, por ser el órgano planificador del gobierno municipal.

La ley Orgánica del  Consejo Local de Planificación desde una estructura orgánica permanente concede una participación protagónica a los líderes de las comunidades y de los movimientos sociales estructuralmente organizados.   

 OBJETIVOS ESTRATEGICOS  A SER ABORDADOS  PARA LA TRANSFORMACION
 DESDE LA  CONSTITUYENTE MUNICIPAL

La visión constituyente debe transversalizar  la actuación pública del nuevo gobierno municipal en relación a las competencias que le corresponda a los distintos órganos municipales, y desde el espacio comunal. Sin embargo, insistimos en la importancia de focalizar  las áreas que consideramos estratégicas y, por ende, prioritarias porque  las mismas  afectan de manera determinante a la sociedad, como son  las siguientes: a) el modelo productivo, b) el tema ético, y c)   la Cultura de la Paz.

 La productividad.- Desde una concepción económica socialista, y las nuevas formas de propiedad social,  impulsar la productividad local, y  contribuir, a atender las  necesidades de la población, y a su vez,  a romper con el rentismo petrolero, desde el criterio de autosustentabilidad municipal y la cultura de la productividad creadora, incluyendo el criterio de cooperar con las metas nacionales de producción, en particular las orientadas a fortalecer la soberanía alimentaria.

Ante el nuevo modelo de gestión nos encontramos, frente a la necesidad de construir una política de las ideas, una política para la creatividad,  y Oscar Varsavsky  plantea que  “la creatividad re­quiere necesariamente la máxima autonomía de pensamiento y cultura, y por lo tanto la máxima independencia política, económica y tecno-cien­tífica posible” del país que ha decidido construir su propio Proyecto Nacional.

A pesar que ciertamente durante los últimos 14 años, Venezuela ha experimentado un efecto dinamizador  de la economía, con el fin  de romper los lazos de dependencia económica de EEUU y del modelo capitalista de desarrollo no ha logrado romper el rentismo petrolero.

Es igualmente importante señalar, que la superación del modelo económico capitalista y sus contradicciones, no ha concluido,  a pesar del enorme esfuerzo realizado, lo que aún afecta a un número importante de venezolanos, entre las cuales podemos señalar la migración de las asentamientos rurales hacia las los asentamientos urbanos y periurbanos, incidiendo en los barrios y en otros casos sobrepoblamiento en los existentes, que reducen la calidad de vida de sus pobladores y  tiende a minimizar la acción del gobierno nacional, en tanto que los gobiernos municipales por falta de voluntad política, en muchos casos, han desasistido a esa población de planes de mejoras conjuntas; de los servicios básicos.

Desde la constituyente municipal es vital que se impulse los criterios de productividad desde un modelo económico socialista, de respeto a la naturaleza, y que la distribución social del conocimiento, el estudio y la investigación, y el trabajo digno, como valores sociales sean algunos de los parámetros básicos en los cuales se sostenga esa productividad social, contrarios a los criterios de la producción de explotación capitalista  acumulativa.

La cultura de la ética.- El abordaje del tema ético, debe ser concebido desde su perspectiva, social, desde la perspectiva administrativa y desde la perspectiva política. 

La ética, desde la perspectiva social, esta vinculada  a los valores de la solidaridad, y  de la corresponsabilidad, de un individuo con el destino de su comunidad, e incluso en la consolidación de la institucionalidad, desde sus espacios de estudio, o de trabajo,  para la construcción de la cultura del bien común, lo cual nutre cualidades de una persona,  aportando, desde el desempeño individual, a  los valores supremos que garantizan el bienestar de una sociedad.

La ética, desde la perspectiva  administrativa,  esta vinculada a la transparencia en el manejo de los bienes y fondos públicos, tanto de los responsables de los órganos municipales, como de las comunidades organizadas, que están obligadas, como los servidores públicos, a administrar con los mismos criterios de idoneidad y honestidad los fondos y bienes públicos que les fueron confiados para el desarrollo de la comunidad.     

La ética política, para Patria Para Todos es la que debe caracterizar la conducta de  la militancia revolucionaria, y del funcionariado, en su desempeño diario. Es lo que se denomina la mística y la entrega por un objetivo cuyo centro esta colocado en valores universales, hacia la comunidad, la patria y la humanidad. 
                                                                                                                                                                La cultura de la paz.- Si bien una de las competencias exclusivas de los órganos del poder público municipal, según la normativa constitucional,  es la justicia de paz, en relación a los problemas locales, de la familia y la violencia contra la mujer, dado los altos índices de criminalidad existentes en el país, y a pesar de los programas que des ese orden ha impulsado el Gobierno nacional, este debe ser un tema que debe ser altamente revisado y discutido, en la constituyente  municipal.


Esta revisión, desde el municipio, permitirá identificar los nudos de la violencia y contribuir, con el plan nacional de reducir los índices de violencia con el involucramiento sistemático de los órganos municipales, y las comunidades organizadas adoptando las herramientas pedagógicas, psicológicas, sociológicas, económicas, deportivas para impulsar, in situ, la cultura de l dialogo y la paz. . 

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